Narra que la idea de “rio”, surge de la duda personal de como se puede lograr, mediante el uso repetido de un sólo objeto, dar a entender el movimiento orgánico de un rio, dando no solo la consistencia de tal, sino que también el concepto de movimiento, ritmo y velocidad, así como también la difracción que produce el agua a distintas velocidades y como esta influye al color y la luz. El poder construir algo de gran complejidad mediante un solo objeto repetible resulta increíblemente interesante como idea, y también es un hilo conceptual que logra reflejar la manera en la cual la naturaleza misma construye elementos complejos mediante partículas subatómicas aparentemente iguales entre sí. Se quiere engañar al espectador, haciendo pasar materiales sólidos por materiales líquidos y manifestaciones intangibles (luz, velocidad y movimiento). Se intenta transformar un objeto rígido como la tabla de madera en algo orgánico y maleable. Con esto se pretende lograr en el espectador un asombro singular al ver la abstracción de un rio que ha sido retirado de su entorno natural y ofrecerle a este un punto de vista poco usual: el de poder ver un rio desde abajo del mismo. El rio existe y se manifiesta sobre la cabeza del espectador, torciéndose sobre sí mismo y cambiando de velocidad mientras sigue su cauce para estrellarse contra la pared. Cualquier cuerpo de agua rige su presencia física por las leyes naturales de proporciones divinas, como tal, la escultura refleja estas mismas leyes de proporción. Fue construida con sus proporciones generales, su largo y su diámetro siendo derivadas de proporciones divinas. Inclusive la cantidad de tablas de madera y sus colores dependen de una cuidadosa consideración de proporciones. La obra puede apreciarse mediante varios puntos de vista y a distintos grados de profundidad: La obra como manifestación estética, como un postre ocular; la obra como asombro ingenieril al tener una escultura de madera que se encuentra suspendido en el aire a gran altura y el cual no se deja saber cómo fue construido; la abstracción de elementos etéreos tales como la velocidad, el movimiento y el ritmo; y finalmente la capacidad de la obra de poderse interpretar como agua y luz aun obstante el uso único de madera, pintura y laca. La obra permanece siendo madera, y como tal un sólido (una composición de sencilla complejidad caótica organizada). Aun así, la composición se da a entender como líquido, como luz y como la interacción simbiótica de ambos. Si la madera proviene de la vegetación y esta invariablemente depende del agua, ¿Que más perfecto que usar madera para manifestar agua? El agua es elemento vital del cual depende toda materia viva de este planeta, es el único elemento que mejor puede dar a entender por qué el planeta Tierra puede ofrecer al universo la naturaleza orgánica y uno de los pocos elementos del universo que logra manifestar las propiedades que conforman la ‘Natura’ (Luz, gravedad, energía y materia).
El autor Pablo Berger, es un artista visual mexicano, actualmente colabora con el diseño del suelo de la Sagrada Familia en Barcelona, y con el desarrollo y elaboración de esculturas de señalética en la ciudad de Basilea Suiza.
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